Se trata de aprovechar los recursos que poseemos para obtener la mayor energía posible y, si se consigue de un modo ecológico pues mucho mejor. En ello están trabajando científicos de la universidad de Córdoba y Jaén junto a investigadores chinos, de Malasia, Italia y Austria con la idea de levantar una planta de producción de biodiesel en Tianjin, una de las ciudades más pobladas del país asiático con más de 10 millones de habitantes.
Los materiales empleados son de lo más humilde: aceite de fritura usado. Con los restos de este aceite se quiere alimentar también el motor de los vehículos. Aunque lo normal es utilizar aceite de cacahuete o soja, los resultados obtenidos en los ensayos con aceites fritos o grasas de cocina son bastante esperanzadores.
No sólo es efectivo, sino que además reduce las emisiones contaminantes, como las de óxido de azufre que se eliminan por completo
Fuentes: Junta de Andalucía
Imagen: http://miqueridopinwino.blogspot.com
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