Las redes sociales contra la delincuencia

Se está comentando mucho acerca del peligro que entraña las redes sociales. Que si la política de privacidad de Facebook, que si los derechos sobre las imágenes de Tuenti. Las redes sociales se han convertido en vehículo para delinquir, eso no podemos negarlo, debido a las múltiples posibilidades que ofrecen. Facilitan el acceso a datos que ya de por sí ofrece el mundo de internet en general, mezclado con nuestra inocencia, y aderezado con con con la picaresca y la malintencionalidad de muchos hacker. Y es que para hacer el mal, la mente humana es más despierta que cuando se trata de hacer el bien. Eso debe ser algo que llevamos en los genes, si no fíjense la facilidad con la que se nos ocurren nuevas travesuras.

Sin embargo, también existe la otra cara de la moneda. El otro lado del mundo, el amanecer entre las tinieblas de esta civilización en la que vivimos. Han saltado noticias de delincuentes que han sido identificados gracias, precisamente a los usuarios de redes sociales.

Este es el caso de un maltratador de animales, acusado de tirar a su perro por un puente. No tuvo otra idea que colgar el vídeo en internet, y los nobles de corazón se vieron obligados moralmente a actuar, como es lógico. Animalistas de todo el mundo se unieron, horrorizados ante unas escenas que llegaron a ser censuradas en varios portales webs, por lo impactante de sus imágenes.

Y fueron unos hackers quienes esta vez, atendiendo a su voz buena y piadosa optaron por trabajar para conseguir un bien. Localizaron los datos del maltratador y accedieron a su perfil en facebook, su correo electrónico y su dirección.

El hecho sucedió en Lituania. Y gracias a la ventana abierta que es Internet se descubrió el lugar, el culpable y en este caso, los testigos se multiplicaron. Tanta fue la conmoción que la misma policía emitió una declaración dando las gracias a los usuarios del sitio web de 15.min.it, por colaborar en el caso.

Hoy ese presunto asesino, está detenido y será acusado de crueldad animal.

Por cierto, el perro sobrevivió.

Estas son las cosas que tiene Internet.